¿Es Ciudadanos un partido machista?

GIULIANA IPPOLITI
En su intervención en el debate de Atresmedia del 7 de diciembre (7D), Albert Rivera defendió la necesidad de revisar la ley integral contra la violencia de género para -como especifica su programa- “igualar las penas con independencia del sexo del agresor”. El candidato a presidente propuso que la ley Integral de Medidas para acabar con la Violencia de Género se modifique “para acabar con dicha asimetría”. Desde entonces, la controversia forma parte del día a día del partido, que promulga la equiparación de la violencia machista con otras agresiones dentro de la familia o el entorno familiar, eliminando el tratamiento especial que se aplica a la violencia ejercida por un hombre contra su pareja o ex pareja mujer. El descontento también afecta al partido que, según el último informe de Metroscopia (El País) y el Observatorio Continuo de Jaime Miquel (Publico.es), cae en las encuestas de manera galopante.

El líder de Ciudadanos a La Moncloa ha dicho en su propia defensa que no se refería a eliminar la agravante que se introdujo en la ley de 2004 y que validó el Tribunal Constitucional en 2008. Al contrario, según asegura, su intención es aplicar las penas en la misma medida para los dos géneros: en la actualidad, cuando el hombre maltrata a su pareja (o ex) recibe más castigo que cuando es la mujer quien maltrata a su pareja (o ex) masculina. Esta disposición fue la mayor novedad en el ámbito penal que introdujo la ley de violencia de género.

L´Hospitalet (Plaça de la Cultura), 19/12/15, Inés Arrimadas, una de las líderes de Ciudadanos, dando su discurso durante el cierre de la campaña electoral. Foto: Mel Lopez.
Inés Arrimadas, una de las líderes de Ciudadanos, dando su discurso durante el cierre de la campaña electoral. Foto: Mel Lopez.

Eliminación de la pena agravada.

El partido naranja propone eliminar la pena agravada para los hombres y además ofrece igualar la violencia de género con la violencia doméstica. En 2004, cuando la ley se encontraba en plena discusión, la Real Academia Española (RAE) recomendó el uso de la expresión “violencia doméstica” y no “de género” y propuso que el proyecto de Ley integral contra la violencia de género pasara a denominarse “Ley integral contra la violencia doméstica o por razón de sexo”. Sin embargo, esta mezcla de un tipo violencia con el otro no se hizo realidad.

“La violencia de género” fue la denominación difundida a raíz de la Conferencia Mundial sobre la Mujer (Pekín, 1995), con la que se identifica “la violencia, tanto física como psicológica, que se ejerce contra las mujeres por razón de su sexo”. A este concepto la ley española agrega “las agresiones a la libertad sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de libertad. En cambio, la violencia doméstica es la ejercida en el terreno de la convivencia familiar.

La de género es una violencia estructural que tiene sus orígenes en el sistema patriarcal y en la desigualdad social entre géneros que este implica.

La propuesta de Ciudadanos – argumentada en el artículo 14 de la Constitución, que establece la igualdad de todos los españoles – cita: “si bien la violencia de género afecta tanto a hombres como mujeres, No podemos permitir, aunque sean muchas menos, las muertes de hombres a manos de sus parejas”.

Barcelona (Hotel Barceló, 3/12/2015) Panfletos de Ciudadanos distribuidos durante el inicio de campaña en el Hotel Barceló.
Panfletos de Ciudadanos distribuidos durante el inicio de campaña en el Hotel Barceló.

Los críticos argumentan que el partido naranja ha ignorado la existencia de una violencia específica hacia las mujeres, respaldada por la ley, que en 2014 se cobró la vida de 51 mujeres.

La inquietud de Ciudadanos por “equiparar” a hombres y a mujeres ante la ley es preocupante. La realidad se evidencia en los números. Estadísticamente más del 90% de los casos de violencia de género tiene como victimario a un hombre, lo que la convierte en violencia machista. Defender a los ciudadanos que agreden a las ciudadanas, es una jugada que no está beneficiando a los naranjas.

Mientras Albert Rivera se proponía nadar lo más lejos posible de las turbias aguas del tema que lo lleva cuesta abajo en las encuestas, la candidata número tres de la lista por Madrid, Marta Rivera, decía en un debate televisivo del pasado 9 de diciembre: “es tan grave que un niño vea cómo su padre mata a su madre, que un niño vea como su madre mata a su padre”. En ese mismo programa, Antonio Hernando, el candidato del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) dijo, “si ustedes no son conscientes de que las mujeres mueren por su condición, es que no han entendido nada”.

La violencia de género cada año cobra un número de vidas preocupante, y resulta curioso que un partido de “la nueva política” proponga un paso atrás en los logros alcanzados con la ley del 2004. Porque no, la violencia de género no es equitativa, su concepto es claro y no se adapta al caso de agresiones a un hombre (ya que en ese supuesto el ser hombre no es el “justificante” de la violencia).

L´Hospitalet (Plaça de la Cultura), 19/12/15, Militantes de Ciudadanos apoyando a Inés Arrimadas durante su discurso en el cierre de campaña. Foto: Mel Lopez.
Simpatizantes de Ciudadanos apoyando a Inés Arrimadas durante su discurso en el cierre de campaña. Foto: Mel Lopez.

Críticas vienen y van.

En un comunicado el PSOE manifestó: “Ciudadanos se coloca en la postura ideológica del negacionismo de la violencia de género. Negar la marca género en la violencia es descargarla de ideología pero también confundir sobre sus orígenes, manifestaciones y consecuencias”. Al respecto el número dos del PSOE, César Luena, añadía: “Ciudadanos además de ser de derechas como sabíamos, es también un partido machista”.

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, afirmó: “Son propuestas desde el desconocimiento, desde la frivolidad. Paradójicamente, algunos hablan de la nueva política y la nueva política significa no conocer los problemas de los españoles.

El candidato de Izquierda Unida (IU) a la presidencia, Alberto Garzón, calificó la propuesta de ‘aberrante’. “Ciudadanos se ha puesto el traje más reaccionario para luchar contra la igualdad”.