Imágenes Monica Pelliccia
Texto Camila Aristizábal Arango
“Somos el partido de la gente, el partido de la calle”, manifestaba con entusiasmo la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Su discurso, en el que destacó las medidas de creación de empleo y apoyo a las comunidades autónomas adelantadas por el PP, tenía como telón de fondo a una multitud enardecida, que culpaba a su partido del empeoramiento de las condiciones de vida en medio de la crisis.
Al igual que la vicepresidenta de Gobierno, el número dos de la lista del PP a las elecciones europeas, Esteban González Pons, llamó a los asistentes a votar por “el único partido que sabe cómo crear empleo”. Entre banderas catalanas, españolas, europeas y de su partido, Pons pidió a sus seguidores a asistir masivamente a las urnas el próximo 25 de mayo.
A menos de 48 horas del inicio de las votaciones, el PP reafirmó las dos propuestas sobre las que se fundamenta toda la plataforma de su candidato al Parlamento Europeo: recuperación económica y unidad.
Xavier García Albiol, alcalde de Badalona, pidió “el sí para Catalunya, España, Europa y la creación de empleo”; Alicia Sánchez-Camacho llamó a una manifestación en las urnas “en contra de los que quieren separar a Catalunya de España, de los que esconden su bandera y los que congelan pensiones”. Finalmente, la líder del PPC, mencionó a los seguidores de ERC y CiU, a quienes catalogó de ser “prácticamente lo mismo” y puntualizó que “el único proceso que hay en Catalunya es el de la creación de empleo y las oportunidades para todos”.
Entre gritos de euforia e indignación, entre promesas de puestos de trabajo y reclamos por falta de seguridad social, el Partido Popular Catalán le puso punto final al proceso que desde hace un mes adelantó asegurarle un puesto en el parlamento europeo a su candidato, Santi Fisas.