En la pista de baile
El baile es una actividad que libera endorfinas, las llamadas hormonas de la felicidad. También endurece los huesos y músculos y ayuda a mejorar la flexibilidad y la coordinación, entre otros muchos beneficios. La gente grande de la Barceloneta puede que no los conozcan todos, pero como muchos otros mayores de Barcelona acuden semanalmente a su casal (entidad popular catalana) para una buena sesión de bailoteo. Y es que se atreven con todo, desde el tango hasta el country, pasando por cumbias, boleros o salsa. Porque la música no tiene edad, y las ganas de moverse tampoco.
Por María García San Narciso
Una pareja baila un tango.
Una pareja bromea en la pista de baile. Se conocieron allí mismo hace ya algunos años.
Ana es una mujer de 89 años que cada martes se convierte en la reina de la pista.
La pareja que es capaz de dar más giros y vueltas.
Una mujer se pone a bailar con su abanico mientras que un hombre la sigue. Termina formándose un corro a su alrededor.
Se forman dos grupos para bailar una canción de country.
Se llevan las manos a la espalda, cogidas, mientras bailan una coreografía grupal.
A Nuria el parkinson que padece no le impide acudir con su marido y sus amigas al baile cada martes por la tarde.
Este hombre no duda en ponerse su gorro para posar ante la cámara.
Cada semana 70 personas, de media, acuden al casal para bailar y, si cae, hacer alguna conquista.
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